HISTORIA DE UN VECINDARIO (Nagaya shinshiroku, 1947), una de las películas menos conocidas del maestro japonés Yasujirô Ozu, se estrenará por primera vez en cines de nuestro país y en su versión restaurada en 4K el próximo martes 12 de diciembre (antes previsto para el 15 de diciembre), coincidiendo con el 120 aniversario del nacimiento del director, y el 60 aniversario de su muerte.
El film del director de títulos tan importantes como "Cuentos de Tokio", "Primavera tardía", "Crepúsculo en Tokio" o "He nacido, pero..." se presentó este año y en su versión restaurada en Cannes Classics del Festival de Cannes y en la sección Klasikoak del Festival de San Sebastián.
La película está protagonizada por Chôko Iida ("El hijo único"), Hôhi Aoki ("Una gallina en el viento"), Chishû Ryû ("El colegio es un lugar agradable"), Mitsuko Yoshikawa ("Hermanos y hermanas de la familia toda") y Eitarô Ozawa ("Los amantes crucificados"), entre otros.
Yasujirô Ozu es considerado uno de los mejores cineastas de todos los tiempos. Su trabajo fue raramente mostrado en el extranjero antes de la década de los sesenta. No empleó el sonido hasta 1935, ni tampoco el color hasta 1958. En 1961 se celebró una retrospectiva de las películas de Ozu en el Festival de Cine de Berlín, donde el director y su obra recibieron la atención mundial. Rodó un total de 53 películas, 26 de ellas en sus primeros cinco años como director. Y todas menos tres con los estudios Shochiku. Murió a los 60 años, pero su obra sigue influyendo a directores tanto de Japón como de otros países de todo el mundo, como Jim Jarmusch, Wim Wenders, Claire Denis, Aki Kaurismäki y Hou Hsiao-hsien.
El propio Wim Wenders comenta en su documental "Tokyo-Ga" (1985): "Si en nuestro siglo hubiera alguna cosa sagrada, si existiese algo como el sagrado tesoro del cine, para mí sería la obra del director japonés Yasujirô Ozu (...). Por mucho que sea típicamente japonés, este cine es, al mismo tiempo, universal. Yo he reconocido a todas las familias del mundo entero, y también a mis padres, a mi hermano y a mí mismo. Para mí, el cine nunca había estado, ni antes ni después, tan cerca de su esencia y de su objetivo: ofrecer una imagen del hombre de nuestro siglo... una imagen útil, verdadera y válida con la que identificarse, pero, sobre todo, desde la cual se puede aprender algo de uno mismo".
Sinopsis: En el Japón de la postguerra, un hombre encuentra en la calle a un niño perdido y lo lleva a su casa, pero nadie quiere acogerlo, ni siquiera por una noche. Finalmente, lo hace una viuda de agrio carácter. Al día siguiente, la mujer lleva al niño a su barrio y averigua que el padre se ha marchado a Tokio y lo ha abandonado.
Fuente: Nota de prensa de A Contracorriente Films